IMG_8978Antes de empezar este artículo quiero dejar claro que la mejor alimentación para un recién nacido es la que sus padres o madres decidan. No es el objetivo de ningún profesional juzgar a nadie por no dar el pecho a su bebé, pero sí es trabajo de los profesionales que nos dedicamos a la atención del embarazo y posparto, y en general a la salud de la mujer, el de proporcionar toda la información a nuestras pacientes.

Dicho esto, el objetivo de este artículo es explicaros por qué es tan importante informarse durante el embarazo acerca de la lactancia, o mejor dicho de las formas de alimentación de nuestros hijos.

Esta necesidad se basa en la experiencia. Durante mi práctica habitual veo muy frecuentemente madres con auténticos calvarios con la lactancia. El posparto de per se es duro. Cansancio, cicatrices, horas sin dormir, emoción incontrolada, sobredosis de hormonas, etc. Si a esto se le suma una lactancia dolorosa, niños que no se agarran bien, aparición de grietas, bebés que lloran y que no ganan peso… Podemos entender el título: “sueño o pesadilla”.

Una compañera el otro día le explicaba a una paciente que nos imaginamos la lactancia como en los anuncios de la televisión o en los carteles de publicidad: mamás guapísimas, maquilladas, estupendas, con bebitos gordos, rubitos e ideales cogiditos al pecho de su estupenda madre sobre un fondo de color pastel, con luz radiante de primera hora de la mañana, etcétera.

Las que hayan dado de mamar a sus hijos o hayan tenido una experiencia familiar cercana saben que eso ocurre, pero no precisamente durante la primera semana después de dar a luz, y que la imagen de una madre al tercer día del parto a las 3 de la mañana dista bastante de esos carteles de publicidad, que al final son eso: publicidad. La lactancia debe ser eso, pero conseguir un agarre perfecto, una mamá sin dolor y con buen aspecto no siempre es posible.

mare amb beb+® ilustrant supervivent c+áncerLos grupos de apoyo a la lactancia nacen con el objetivo de reunir a un grupo de parejas y a sus recién nacidos para solucionar los problemas que puedan surgir con la lactancia. Están muy bien. También existen consultas específicas de profesionales formados en lactancia materna (suelen ser matronas pero también hay pediatras y ginecólogos). En este tipo de consultas se “solucionan” o se intentan solucionar problemas de agarre y de posición que han podido provocar grietas y dolor con las tomas, se resuelven dudas que puedan surgir (como saber cada cuánto hay que ofrecer el pecho al recién nacido), y se comparten vivencias entre los asistentes.

Sin embargo creo que en ese momento ya hemos llegado tarde porque el mal ya está hecho. Estás mamás ya presentan grietas muchas veces, ya han iniciado lactancias mixtas por no alcanzar el peso adecuado, o ya han pasado momentos desagradables pensando quizás en abandonar la lactancia e iniciar alimentación con leche artificial.

Es por este motivo que creo que durante el embarazo es el momento en el que nos deberíamos informar acerca de este tema. Tenemos tiempo, sobretodo si es el primero, y no tenemos la desesperación ni la premura de solucionar ningún problema. El establecimiento de la lactancia es un momento crítico, que puede resultar sencillísimo, pero también podemos encontrarnos múltiples obstáculos.

Es muy importante darse cuenta de lo que va a suponer la lactancia. Si se hace bien debe ser a demanda, sin horarios y sin mucha posibilidad de previsión. Ya sea de día o de noche, nuestro bebé puede solicitar mamar a cualquier hora y en intervalos que varían mucho de un recién nacido a otro y en los diferentes momentos del día.

De este modo, leer, acudir a grupos de apoyo de la lactancia, o incluir estos temas en los cursos de preparación al parto, pueden ayudar a que las madres tengan la información adecuada. Así podrán solucionar los pequeños problemas que puedan surgir sin que éstos evolucionen a auténticos desastres y momentos de desesperación que lleven al abandono de la lactancia, cuando se hubiese podido evitar con una correcta información.

En Mater Training nos basamos en el concepto de que “la información es poder” y por ello desde el principio hemos abogado por incluir los temas acerca de la lactancia en nuestras guías. Creemos firmemente que con recursos en el bolsillo se pueden solucionar muchos problemas, y por esto apostamos por ofrecer las herramientas oportunas a todos nuestros usuarios, dándoles así este poder.